Domaine Vincent Girardin es una finca familiar en Borgoña, reconocida por su compromiso con la viticultura sostenible, orgánica y biodinámica. Con una gestión meticulosa del viñedo y una mínima intervención en la bodega

Reconocida por su experta artesanía y sus altos estándares constantes, Maison Vincent Girardin entrega aquí un Pinot Noir regional de calidad excepcional . El Cuvée Saint Vincent 2023 es mucho más que una simple introducción a Borgoña: es una verdadera expresión del estilo Girardin, que combina pureza de fruta, precisión de vinificación y elegancia de envejecimiento. Producido a partir de viñas de 35 años plantadas en los suelos arcillo-calcáreos de la Côte de Beaune , este cuvée es el fruto de un trabajo meticuloso en el viñedo y en la bodega. Vendimia manual, selección rigurosa, maceración en frío, cuidadosa crianza durante 15 meses en barricas de roble (30% madera nueva): cada paso está diseñado para revelar la nobleza del Pinot Noir, sin artificios.

En nariz, el vino seduce con sus aromas limpios de pequeños frutos rojos: frambuesa, grosella negra, fresa. En boca, el ataque es suave, los taninos sedosos, y el resultado general revela una hermosa profundidad, equilibrada por una frescura bien controlada. Una cuvée que combina accesibilidad y refinamiento, ideal para realzar carnes rojas, aves asadas, quesos o charcutería fina. Un vino con la firma de una autoridad en Borgoña, para saborear hoy o para guardar con esmero durante algunos años.

Grado alcohólico: 13.00

Capacidad botella: 75cl

Contiene sulfitos.

Elaborador: Domaine Vincent Girardin

Maxime Cheurlin es un vigneron de referencia de Bourgogne, sexta generación de la familia de viticultores Noëllat. Su bisabuelo Georges Noëllat fue quien dio nombre a la finca. En 2010, su abuela Therèse decidió cederle la responsabilidad de la bodega y con tan sólo 20 años vinificó su primera añada, elaborando algunos vinos que causaron sensación y lo encumbraron como una joven promesa que se ha consolidado con los años.

Las uvas se vendimian a mano, se despalillan al 100% (excepto en algunos casos excepcionales en los que se puede incluir hasta un 30% del raspón) y se maceran en frío durante unos días antes de que comience la fermentación (únicamente con levaduras autóctonas).

Maxime prefiere el término “infusión” al de extracción, por lo que los bazuqueos son poco frecuentes y suaves. Considerando que la intensidad de sus terroirs puede soportar el roble nuevo, utiliza entre un 30 y un 100% según la denominación y la añada. La crianza dura entre 14 y 20 meses y los vinos se embotellan generalmente sin clarificar ni filtrar.